La iniciativa, llevada a cabo gracias al aporte de 3 millones 500 mil pesos del Gobierno Regional, también incluye a jóvenes que infringieron la ley y tiene como objetivo acercar el deporte y promover el ejercicio del derecho a la recreación de niños y adolescentes. 

Todos los sábados, los niños, niñas y jóvenes de las residencias Hatary y Rimanakuy, dependientes del Hogar de Cristo y colaboradoras del Servicio Nacional de Menores (Sename), se trasladan hasta la Avenida del Mar para aprender y disfrutar de la práctica del bodyboard; esto es posible gracias a la adjudicación del proyecto “Clínica de bodyboard para niños y jóvenes: el mar como alternativa recreativa deportiva”, correspondiente a los fondos de la línea de alto impacto del Gobierno Regional, por un monto de 3 millones 500 mil pesos.

Las clases están a cargo de la escuela Maiá Kú. Tras una actividad introductoria y una breve charla sobre el cuidado del medioambiente y los valores que priman en el deporte, los niños y niñas se colocan los trajes de buzo y se lanzan al mar, bajo la atenta supervisión de los profesores del taller, quienes les enseñan las técnicas básicas para practicar el bodyboard. La instancia que se extenderá hasta el mes de noviembre, contempla 12 sesiones y beneficiará a 60 niños, niñas y jóvenes, tanto del sistema de protección como de justicia juvenil, quienes tienen clases diferenciadas los sábados en la mañana.

Carlos Galleguillos, seremi de Justicia y Derechos Humanos, destacó la actividad: “Nosotros valoramos esta iniciativa que busca integrar a los niños, niñas y jóvenes del Servicio Nacional de Menores a una práctica deportiva como el bodyboard. Sentimos que estamos avanzando, pero son más las voluntades que debemos sumar para cumplir con la protección de sus derechos”, apuntó.

En tanto, la directora regional del Sename Coquimbo, Verónica Zárate, hizo hincapié en el apoyo del Gobierno Regional para concretar este proyecto: “El Sename ha enfocado su gestión hacia el ejercicio de los derechos de niños, niñas y adolescentes; este proyecto permite que el derecho a la recreación y al esparcimiento pueda concretarse para niños y niñas del sistema residencial y para jóvenes de justicia juvenil, por ello nuestros agradecimientos por la instancia”.