El curso entregará conocimientos técnicos–prácticos en diversas disciplinas que irán en beneficio de los niños y niñas de residencias.

Con la tradicional bienvenida por parte de los directivos de la Universidad Autónoma de Chile y la presentación de la malla académica, iniciaron sus clases las 22 educadoras de trato directo de residencias colaboradoras del Servicio Nacional de Menores (Sename) del Maule.

La iniciativa se concretó gracias al trabajo entre la dirección regional del servicio, Desafío Levantemos Chile y la Universidad Autónoma de Chile, sede Talca. La coordinación entre las entidades tiene por finalidad potenciar los conocimientos de educadoras y educadores de trato directo mediante un curso de capacitación, el cual fortalezca el trabajo con los niños y niñas de las residencias. El objetivo del curso es nutrir de conocimientos técnicos – prácticos en diversas disciplinas que imparte la universidad, desde un enfoque académico y sistémico de contenidos pedagógicos, psicosociales y de salud.

Julia Contreras, educadora de trato directo de Mi Hogar Pelluhue, expresó que “creo que esto es lo que debería hacerse, que las universidades, que la gente común tome conciencia de lo que significa tener un niño en una residencia, porque si están ahí es a causa de que la familia no cumplió o la misma sociedad no cumplió en apoyarlos”.

Nicolás Canales, líder de inclusión social de Desafío Levantemos Chile, destacó la amplia convocatoria dirigida a todas las educadoras de trato directo de la región: “Se invitó a todas las residencias a participar de este plan piloto, con el propósito de mejorar los procesos y lo que pasa diariamente en su interior”. En tanto, Katherine Valenzuela, directora de asuntos estudiantiles de la universidad, explicó que “las clases se realizarán dos veces por semana y comprenden formación en el área de la pedagogía, para el acompañamiento dado por las educadoras en la residencia, y en las áreas de las ciencias sociales”.

Por su parte, Ana Cecilia Retamal, directora regional del Sename, señaló que “la coordinación entre las instituciones que hacen posible este curso se materializa con este plan piloto, que en un periodo de dos años habrá capacitado a más de 150 educadoras de toda la región, profesionalizando así la labor que realizan día a día con los niños, niñas y adolescentes”.