Educación para todos: Jóvenes que infringieron la ley inician su año escolar 2018
Este año, 33 adolescentes podrán completar sus estudios de enseñanza básica y media en la escuela Adolfo Pérez Esquivel, que funciona al interior del Centro de Justicia Juvenil del Sename, en Las Compañías.
Con la presentación del equipo docente se dio inicio al año escolar 2018 del Centro de Educación Integral de Adultos (CEIA) Adolfo Pérez Esquivel, que por tercer año funciona al interior del Centro de Internación Provisoria y Centro de Régimen Cerrado (CIP-CRC) del Servicio Nacional de Menores (Sename), ubicado en Las Compañías.
En total, 33 jóvenes de enseñanza básica y media retomarán sus estudios -muchos de ellos después de años de deserción escolar- a través de metodologías pertinentes al contexto de privación de libertad.
De este modo, el CEIA Adolfo Pérez Esquivel busca garantizar a los adolescentes procesos educativos de calidad que contribuyan a su formación integral y que favorezcan su reinserción, una vez cumplida la sanción. Así lo explica la directora de la escuela, Karina Basaure, “el objetivo del primer fue la implementación; el segundo año, establecer una rutina en los jóvenes y este tercer año es el fortalecimiento técnico. Es decir, poder dar anclaje a las directrices que las escuelas en contextos de encierro vienen desarrollando a partir de la alianza estratégica entre el Ministerio de Educación y el Sename, pero con nuestra propia impronta”.
En tanto, la directora regional del Sename, Verónica Zárate, destacó que uno de los objetivos del Servicio Nacional de Menores es brindar oportunidades a quienes han infringido la ley. “Trabajamos en el ejercicio y restitución de derechos, pero también apoyando el proceso de reinserción social de aquellos jóvenes que han sido sancionados por la Ley de Responsabilidad Penal Adolescente, apostando a generar oportunidades para que esa reinserción se dé en las mejores condiciones. Para ello la capacitación, la educación y el trabajo psicosocial debe ser de la mejor calidad”, manifestó.
El CEIA Adolfo Pérez Esquivel, dependiente de la Fundación Paihuén, funciona gracias a la subvención del Ministerio de Educación y a los recursos aportados por el propio Sename. Al igual que cualquier establecimiento educacional, debe cumplir con la malla curricular obligatoria, así como con un completo equipo docente.