Como parte del proceso de reinserción, se prepararon todo el año para rendir la Prueba de Selección Universitaria.

Humberto tiene una idea clara: “me gustaría tener una empresa propia para reparar computadores, eso es lo que tengo proyectado a futuro”. Él es uno de los nueve jóvenes del Centro de Internación Provisora y Régimen Cerrado (CIP-CRC) de Limache que se han estado preparando todo el año para la rendición de la Prueba de Selección Universitaria (PSU), que se dio esta semana. Humberto sueña con estudiar Técnico Eléctrico en el DUOC, para lo cual, además de enfocarse en las materias que evalúa la PSU, ha estado aprendiendo sobre el manejo de la tecnología en la sala de computación dispuesta dentro del centro.

Jorge Maturana, director del CIP-CRC, señaló que “ha sido un proceso bastante interesante, en el cual han participado no sólo funcionarios de la escuela del centro, sino también terapeutas ocupacionales y toda el área de educación y ocupación. Hay un gran trabajo previo de manera que logremos insertar a nuestros jóvenes en la red educativa y que esto les sirva para reinsertarse socialmente”.

Por su parte, el director regional del Sename, Rachid Alay, celebró esta buena noticia, señalando que “es una situación que cada año nos alegra, se ha estado produciendo de manera permanente en el centro lo que habla muy bien del trabajo que es realizado por todo el equipo del CIP-CRC. Lo que más nos alegra es que los jóvenes están en un proceso de reinserción, que tiene que ver con dar un paso adelante en lo que es el ámbito educativo”.

En tanto, la seremi de Justicia y Derechos Humanos, Amaia Arraztoa, enfatizó que “la educación tiene una importancia trascendental en los procesos de reinserción social y por eso, desde nuestro ministerio, valoramos tremendamente todos los esfuerzos que han impulsado tanto Sename como Gendarmería para que puedan participar de la PSU. Es gracias a ello que este año 9 jóvenes rindieron la prueba, y en este sentido, estamos muy contentos de esta alta participación, que demuestra el interés de ellos por cambiar el rumbo de sus vidas y por poder reinsertarse a la sociedad”.

Tras la rendición, los jóvenes se encuentran a la espera de los resultados que serán publicados el 26 de diciembre, entretanto, estarán revisando los procesos de matrícula que ofrecen las distintas instituciones de la región, para luego definir cómo forjarán un futuro más próspero.