Por segundo año consecutivo la Corporación Cambiando Destino realizó celebración de Navidad para niños de residencias
La institución, que agrupa a ex residentes de Fundación Mi Casa, cuenta con un convenio de colaboración con el Servicio Nacional de Menores Los Ríos.
Más de 80 niños de seis residencias de protección de la red Sename en Los Ríos, participaron en la celebración navideña que organizó la Corporación Cambiando Destinos, en dependencias del Club Aéreo de Valdivia. La actividad, que contó con el apoyo de diversas instituciones de la región, permitió que los niños disfrutaran de una jornada llena de sorpresas finalizando con la visita del Viejo Pascuero.
La directora regional del Sename Los Ríos, Valeria Salazar, destacó el propósito de la iniciativa: “Ha sido un momento muy alegre para todos, reflejando que el esfuerzo de las personas que estuvieron en la organización, valió la pena. En ese sentido, estos estímulos nos motivan a impulsar acuerdos con distintos actores de la sociedad, a modo de generar una mejor labor en torno a la infancia. Sentimos que durante esta jornada esa estrategia se vio bien reflejada”, afirmó.
Del mismo modo, Marcelo Quiñelén, presidente del Club Aéreo de Valdivia, señaló sentirse “contento con seguir apoyando esta iniciativa en favor de los niños por segundo año consecutivo, donde se desarrolla una dinámica abierta que facilita el acercamiento interinstitucional, el cual permite que este espacio aeronáutico se abra a la comunidad”.
En tanto, Luis Améstica, presidente de la Corporación Cambiando Destinos, detalló las motivaciones de su institución para organizar esta actividad: “Hoy tenemos a muchas personas comprometidas con los niños, desde grandes instituciones a voluntarios que nos contactaron por redes sociales, todo ese apoyo lo valoramos profundamente, ya que nos permitió generar una hermosa jornada de diversión dentro del espíritu navideño. Son los niños el foco principal que nos motiva, en ese sentido, todo lo que podamos entregarles nos retroalimenta mutuamente”, sostuvo Améstica.
Finalmente, dentro del equipo de voluntarios, Ingrid Valdivia, integrante de la Agrupación de Risoterapia para los Niños (Risuss), de la Universidad San Sebastián, manifestó que “nos gratifica el hecho de ver a los niños felices, ha sido una experiencia enriquecedora para nosotros como estudiantes, pudimos compartir con ellos y transmitir, a través de nuestra dinámica, la motivación de compartir alegría por intermedio de la risoterapia”.