El servicio agradece a ministerios, Unicef, empresas y organizaciones que han hecho llegar insumos de diversa índole para que niños, niñas, adolescentes y funcionarios puedan hacer frente de mejor forma estos tiempos de pandemia.

Desde el día 15 de marzo, todos los centros y residencias de la red del Servicio Nacional de Menores (Sename) se encuentran cumpliendo estrictas medidas para evitar la propagación del covid-19.

A lo largo de estos meses, el servicio ha recibido el apoyo de distintos organismos e instituciones públicas y privadas, en forma de insumos de protección, telefonía móvil para que niños y jóvenes realicen videollamadas con sus familias, conectividad a internet como apoyo en sus estudios y recreación, junto a programas virtuales para promover rutinas deportivas en el contexto de la emergencia sanitaria, entre otras iniciativas.

“Agradecemos profundamente todas las donaciones que hemos recibido durante este periodo, las que nos permiten fortalecer nuestra gestión, mejorar las rutinas en los centros y potenciar nuestro trabajo que ha debido intensificarse producto de la pandemia, con el fin de entregar la mejor atención y cuidado a los niños, niñas y adolescentes que están en la red, así como también apoyar en el resguardo y cuidado de nuestros trabajadores”, sostiene la directora nacional (s) del Sename, Claudia De La Hoz.

Aportes

Unicef Chile realizó una importante donación al Ministerio de Desarrollo Social y Familia, correspondiente a insumos de protección contra el coronavirus para distribuir en centros de la red Sename, entregados a través de la Subsecretaría de la Niñez en coordinación con el servicio: el aporte total consiste en 49 mil mascarillas de tres pliegues, 47 mil mascarillas N95, 730 litros de alcohol gel, 9 mil pares de guantes, 416 pecheras con mangas y mil protectores faciales, los cuales fueron distribuidos en los centros de protección de todo Chile para niños, niñas, adolescentes y personal de la red.

También gracias a Unicef, junto a la Fundación Fútbol Más, se ha ido desarrollando el programa virtual “Mi Casa, Mi Cancha”, que se comenzó a aplicar con jóvenes que se encuentran en la Residencia Familiar San Miguel. El proyecto es una serie de desafíos y juegos difundidos semanalmente a través de herramientas audiovisuales, invitando a los jóvenes a participar activamente en actividades deportivas ligadas al fútbol. La instancia les ha permitido desarrollar estrategias de autocuidado e higiene personal, promoviendo su actividad física en espacios reducidos.

Asimismo, el Ministerio de Ciencia, Tecnología, Conocimiento e Innovación hizo entrega de 2 mil escudos faciales reutilizables, los que serán distribuidos en diversas residencias a lo largo de todo Chile. Estos son elementos de protección fabricados en Chile, 100% reutilizables y de fácil armado, que permitirán apoyar el trabajo diario en 55 centros de la red.

En tanto, la Confederación de la Producción y del Comercio (CPC), junto a representantes de empresas y particulares, han hecho entrega hasta ahora de más de $450 millones que benefician a centros y residencias en las regiones de Valparaíso, Metropolitana, O´Higgins, Biobío, Araucanía, Los Lagos y Magallanes, con hogares ubicados en comunas como Puente Alto, Los Ángeles, Collipulli y Cañete, entre otras.

Por su parte, el Instituto Nacional de la Juventud (Injuv) donó kits de emergencia con elementos sanitarios, de aseo y juegos de mesa para hacer más ameno el aislamiento por coronavirus de los adolescentes, favoreciendo la salud mental individual y grupal en un contexto de incertidumbre y estrés.

En la misma línea, la empresa de telefonía Huawei firmó un acuerdo con el Ministerio de Justicia y DD.HH. para repartir 380 celulares de última generación en diversas residencias y centros a lo largo del país, iniciativa que apoya a más de 5.500 niños, niñas y adolescentes, quienes podrán realizar videollamadas y otro tipo de comunicación con sus seres queridos. De forma paralela, VTR acordó con la cartera un convenio de colaboración que abarcará a 13 centros y residencias de protección de administración directa en las regiones de Arica y Parinacota, Valparaíso, Metropolitana, Biobío y La Araucanía, que atienden a más de 350 niños y niñas, para así mejorar la conectividad en sus dependencias y favorecer la educación y recreación de los beneficiados.