Los festejos se enmarcaron en un día cargado de actividades y rutinas en torno al Conejo de Pascua y el trabajo en equipo.

Con alegría y emoción se desarrolló el Domingo de Resurrección en las distintas residencias familiares y colaboradoras de la ciudad de Arica. En primera instancia, el conejito visitó las residencias familiares femenina y masculina, las cuales son administradas directamente por el Servicio Nacional de Menores (Sename). En la oportunidad, los adolescentes buscaron huevitos de chocolates en compañía de sus tutores, quienes prepararon las canastas para la celebración.

Paralelamente, las residencias “Pukara” e “IMA”, colaboradoras del servicio donde residen actualmente 30 niños y niñas de 7 a 15 años, realizaron rutinas como la búsqueda de chocolates, manualidades, festejos y, sobre todo, compartir con sus pares fortaleciendo la amistad y el trabajo en equipo. Por lo mismo, en todas las residencias de la ciudad se vio un gran despliegue y compromiso por parte de los trabajadores de la red proteccional del Sename Arica y Parinacota, quienes de alguna forma se transformaron en “ayudantes” del Conejo de Pascua en tiempos de pandemia.

“Sin duda, esto no hubiese sido posible sin la ayuda de los funcionarios del servicio, ya que el fin de semana generaron diversas iniciativas, desde la ornamentación de sus respectivas residencias hasta la habilitación de espacios de reflexión, pasando por la confección de cajitas y canastas para los huevos. Fue una bonita jornada, siempre enmarcada en el autocuidado que debemos tener en estos tiempos”, comentó Pablo González, director regional del Sename Arica.

Las actividades incluyeron, además, la historia del Conejo de Pascua, juegos, manualidades, dibujos, comida, reciclaje, bailes y la entrega de los esperados huevos de chocolate.