Trabajos comunitarios beneficiaron a párvulos en Tarapacá
Jóvenes que cumplen sanción en el programa de Beneficio a la Comunidad (SBC), operado por Serpaj, entregaron escudos faciales y dispensadores de alcohol gel al jardín infantil Caracolito, de Junji. Con alegría recibieron en el jardín infantil los trabajos realizados por dos jóvenes del programa “Luis Pérez Aguirre”, del Servicio de Paz y Justicia (Serpaj), organismo que colabora con el Servicio Nacional de Menores (Sename) en el cumplimiento de sanciones en el medio libre.
Los jóvenes elaboraron los escudos faciales y dispensadores como parte de sus sanciones, las que fueron decretadas por un juez, y que consiste en realizar actividades no remuneradas en favor de la comunidad. En este caso, Serpaj tiene la misión de acompañar a los jóvenes en el proceso.
“En la vida siempre es bueno poder corregir las faltas cometidas, es así que a través del programa de servicio en beneficio de la comunidad administrado por Serpaj, organismo colaborador del Sename, podemos apoyar a los jóvenes en la restauración del daño causado. Serpaj continuó trabajando con los jóvenes de manera virtual durante la pandemia, lo que ha significado que cumplan con lo ordenado por los tribunales de justicia y, a la vez, resignifiquen su trabajo comunitario”, destacó la directora regional del Sename Tarapacá, María Teresa Osorio.
Durante la pandemia se ha mantenido el trabajo de manera telemática con los jóvenes que forman parte del programa, lo que les permite cuidarse sin dejar de lado sus sanciones y así cumplir ante la ley. Es por ello que se establecieron nuevas formas de monitoreo virtual a través de videos realizados por sus coordinadores, donde se entregaban las instrucciones para realizar los trabajos que se les asignaron.
“Transformar los errores en oportunidades y tesoros para otros, es la enseñanza y el regalo que nos entregan dos jóvenes bajo el cuidado del Sename. Sus manos y talentos han elaborado elementos de protección personal que ayudarán al cuidado de la salud de nuestros párvulos y funcionarias en medio de la pandemia”, indicó por su parte el director regional de Junji, Mauricio Prieto.
La institución agradeció la dedicación y colaboración que ha demostrado Serpaj en mantener una búsqueda permanente de entregar alternativas a jóvenes en conflicto con la ley, permitiendo que puedan resignificar su situación retribuyendo a la comunidad cualquier daño cometido, y por otra parte beneficiar, en esta oportunidad, a la comunidad educativa que pertenece a los jardines infantiles.
Cabe destacar que esta no es la primera vez que jóvenes elaboran escudos faciales como parte del cumplimiento de sus sanciones, ya que anteriormente los donaron a residencias de protección de la región.