Centro de Justicia Juvenil de Copiapó recibió Sello COVID 19 por cero contagios entre adolescentes
La ACHS hizo entrega de este reconocimiento tras hacer seguimiento a las medidas sanitarias adoptadas por el CIP-CRC de Copiapó desde el inicio de la pandemia.
El Centro de Internación Provisoria (CIP) y el Centro de Régimen Cerrado (CRC) de Copiapó, dependiente del Sename Atacama, recibió la certificación Sello COVID 19 entregada por la Asociación Chilena de Seguridad (ACHS), gracias a los excelentes resultados obtenidos tras la puesta en marcha de las medidas sanitarias asumidas por el recinto, en el contexto del Protocolo Covid establecido a nivel nacional por el Servicio Nacional de Menores.
Desde el inicio de la emergencia, el centro de justicia juvenil se destacó por ser uno de los pocos establecimientos que, hasta la fecha, ha tenido cero contagios de coronavirus entre los adolescentes a nivel país. En tanto, los funcionarios y funcionarias del recinto arrojaron una muy baja propagación del virus gracias al potente trabajo colectivo preventivo implementado.
El jefe de Servicios Preventivos de la ACHS, Julián Vidal, felicitó al equipo del recinto por la certificación: “Quiero invitarlos a que continúen con la misma línea de trabajo y que sigan desafiándose, junto con nosotros, a mejorar las medidas preventivas para evitar el Covid 19”, señaló.
“Ha sido un gran desafío y un enorme esfuerzo cumplir con los requisitos exigidos por la ACHS, pero valió la pena; gracias a todo el protocolo ejecutado hemos logrado mantener a los jóvenes y al equipo alejados del riesgo de contagio”, aseguró por su parte la directora regional del Sename Atacama, Carolina Cortés.
El Sello COVID 19 es una certificación desarrollada por ACHS basada en los estándares nacionales e internacionales, que aseguran una máxima gestión para la prevención del virus en los centros de trabajo. La obtención de este reconocimiento tiene cinco pasos asociados que se deben acreditar con evidencia objetiva del 100% de cumplimiento de los puntos evaluados en la pauta, entre los cuales están la implementación de horarios diferenciados o flexibles para ingreso y salida y turnos de colación de las y los trabajadores; organización de horarios de grupos fijos y pequeños para reducir el contacto físico en los espacios laborales, al igual que del ingreso de personas externas; la obligación del uso de mascarillas desechables, del constante lavado de manos, toma de temperatura, disposición permanente de alcohol gel y dar cumplimiento al registro sanitario tanto de funcionarios como de personas externas.